El viejo y el nuevo teatro Mariinsky. Diamond
Schmitt
Dmitry
Lovetsky
La
sala principal, con capacidad para 2.000 personas, distribuidas en tres
niveles de balcones, con forma de herradura; con un foso de orquesta
para 120 músicos, y una caja escénica dotada con uno de los equipamiento
técnicos más vanguardista, que permitirá cambios de producciones sin
límite. Las pruebas de acústica fueron muy positivas.
En medio de los
sinuosos canales y edificios señoriales del siglo XIX que se alinean en las
calles de San Petersburgo, el jueves fue la gala inaugural del nuevo teatro,
conocido como el Mariinsky II, la nueva casa de la ópera y el ballet de San
Petersburgo. Son 80.000 metros cuadrados construidos frente a los 23.000 del
antiguo teatro, separados apenas unos metros y con vocación de convertirse en uno de los
más importantes del mundo. Ha sido diseñado por
el estudio canadiense Diamond Schmitt, y su coste ha alcanzado los
538 millones de euros. Será la nueva casa de la ópera y el ballet de San
Petersburgo.
Diamond
Schmitt
El Mariinsky II se presenta como un paradigma
de la simplicidad. Un exterior de vidrio y piedra caliza, que se une al viejo
Mariinsky, construido en 1860, por una pasarela sobre el canal Kriukov. El
interior cuenta con una espectacular escalera abierta, suelos de mármol y
paredes revestidas con láminas traslúcidas de ónix color miel. La discreta
iluminación focal se completa con lámparas de cristal de Swarovski.
Alexander
Demianchuk
Dmitry
Lovetsky
Olga Maltseva
"He estado
esperando esto desde hace muchos años", dijo Valeri Gergiev, director del
Mariinsky y director principal de la Orquesta Sinfónica de Londres. El nuevo
teatro "nos introduce en una nueva era de posibilidades artísticas ampliadas".
"Espero que este teatro sea visto como
un gigante cultural y que se encuentre
entre los más famosos teatros de ópera
del mundo".
Anatoly Maltsev
Anatoly Maltsev
En la gala
participaron, entre otros, Olga Borodina, Plácido Domingo, Anna Netrebko,
René Pape; las bailarinas Ulyana Lopatkina y Diana Vishneva, el director de
orquesta y viola Yuri Bashmet y el violinista Leonidas Kavakos.
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