Occhi fragile: El canto de las dunas

Frans Lanting

Durante siglos la curiosidad y la intriga han llamado la atención al escuchar, en el silencio del desierto, el ‘canto’ de las dunas, un sonido grave cono un gemido o un zumbido emitido cuando la arena se desliza por la pendiente lanzada por el viento o como resultado de un impacto, como unas pisadas. De hecho, las dunas cantan, crean sonidos en función del tamaño de los grano de arena. Pero todas las dunas no cantan igual: una duna con granos polidispersos produce un espectro muy amplio y ruidoso, mientras que una duna con granos ordenados produce una frecuencia bien definida.

George Steinmetz

Para entender la razón de esta diferencia, el físico Simon Dagois Bohy hizo grabaciones en directo del canto de dos dunas: una, cercana a Tarfaya, ciudad portuaria en el suroeste de Marruecos; y, otra, en Al-Askharah, ciudad costera en el sureste de Omán. En Marruecos, la arena canta en sol sostenido alrededor de 105 hertz. de manera constante. La duna de Omán, sin embargo, canta muy bien, pero es imposible identificar una sola frecuencia, pues genera una cacofonía, ya que los sonidos son emitidos en todas las frecuencias posibles, entre 90 y 150 hertz., desde el fa sostenido al re. La duna de Omán está en realidad formada por granos cuyo diámetro varía desde 150 hasta 310 micras (millonésimas de metro), una gama mucho más amplia que la de Marruecos, cuyos granos tienen un tamaño entre 150-170 micras. La arena de Omán es inherentemente más ruidosa.

Sam Abell

Thomas J. Abercrombie

"Esto sugiere que el tamaño de los granos es un factor importante para determinar el canto de las dunas", dice Dagois-Bohy. "La frecuencia del sonido no depende del tamaño o la forma de la duna, ni de las vibraciones en las capas subyacentes de la arena causada por el movimiento de ésta en la superficie, sino del diámetro de los granos individuales", que, dependiendo del tamaño y la forma en que se deslizan sobre la superficie, puede dar lugar a un espectro acústico amplio y ruidoso, o en frecuencias específicas y bien definidas. El sonido se produce, de hecho, por el movimiento sincronizado de los granos individuales. "No está claro cómo el movimiento del flujo de arena da lugar a sonidos similares a las notas musicales. Una hipótesis es que los granos de arena que fluyen sincronizados vibren al unísono. Las infinitas vibraciones empujen el aire como si fuera la membrana de un altavoz".