El celebre arquitecto murió la noche del miércoles en un hospital de Río de Janeiro, la ciudad en la que nació el 15 de diciembre de 1907. EFE
El paseo de los Ministerios en Brasilia. Eraldo Peres
Oscar Niemeyer cobró fama mundial a mediados del siglo XX,
cuando proyectó los edificios oficiales de Brasilia, capital que diseñó de la
nada a mediados del siglo pasado con el urbanista Lucio Costa. Fue pionero en
el uso del cemento armado como un elemento dúctil con funcionalidad artística, en
1947 formó parte del equipo internacional de arquitectos que diseñó la sede de
las Naciones Unidas en Nueva York, liderado por Le Corbusier.
El edificio del Congreso Nacional en Brasilia. Eraldo Peres
Por sus obras recibió numerosas distinciones y premios como
el Pritzker de Arquitectura por su trayectoria en 1988, cuando había cumplido
ya los 80 años, y el Premio Príncipe de Asturias de las Artes en 1989, entre
otros muchos galardones.
El Museo de Arte Contemporáneo de Niteroi. Vanderlei Almeida
No es el ángulo recto lo que me atrae, ni la línea recta, dura,
inflexible, creada por el hombre. Lo que me atrae es la curva libre y sensual,
la curva que encuentro en las montañas de mi país, en el curso sinuoso de sus
ríos, en las olas del mar, en el cuerpo de la mujer preferida. De curvas es
hecho todo el universo, el universo curvo de Einstein.
El Centro Cultural Oscar Niemeyer en Avilés. Luis Dávila
La Fundación Oscar Niemeyer en Niteroi. Felipe Dana
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