Vijecnica,
originalmente el ayuntamiento de Sarajevo, fue uno de los proyectos más
costosos de su tiempo. Se construyó en una mezcla de estilos árabe y oriental, para
reflejar el carácter multicultural de la ciudad, y se inauguró en 1896. El 28 de junio 1914, se produjo el atentado de Sarajevo que causó la muerte del archiduque Francisco Fernando, heredero de la corona del Imperio austrohúngaro, tras
asistir a una recepción en el edificio. El suceso propició el desencadenamiento
de la Primera Guerra Mundial y marcó el inicio de la huella histórica de
Vijecnica.
Reuters
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Convertida en la
Biblioteca Nacional en 1949, fue destruida por los bombardeos serbios en 1992
durante el asedio de Sarajevo, uno de los episodios más sangrientos de la
guerra de Yugoslavia. Desaparecieron una buena parte de sus fondos,
más de dos millones de volúmenes, incluidos más de 700 manuscritos e
incunables, una colección única de libros y publicaciones históricas bosnias, y
más de 155.000 rarezas bibliográficas.
En medio de la catástrofe, bomberos, voluntarios y personal de la biblioteca intentaron salvar lo que pudieron bajo las balas de los francotiradores. Algunos perdieron la vida. Manoocher Deghati
El violonchellista Vedran Smailović tocando en las ruinas de la biblioteca
poco después de los bombardeos. Mikhail Evstafiev
Tras la
restauración, el viernes, 9 de mayo, el Día de la Unión Europea, se reabrió de nuevo la Biblioteca
Nacional de Bosnia y Herzegovina, para
conmemorar el centenario de la Primera Guerra Mundial, con proyecciones en 3D
en su fachada que mostraron los momentos clave en la historia del edificio. Su
alcalde, Ivo Komsic, afirmó que “la historia de Vijecnica es un símbolo de
Sarajevo… Porque la historia de Vijecnica es la historia de Sarajevo”. En
la actualidad, albergará la Biblioteca Nacional y Universitaria de Bosnia y
Herzegovina, el salón de sesiones del Ayuntamiento y un museo. Su espacio se
utilizará también para varios eventos de protocolo, conciertos y exposiciones.
Proyección de imágenes
relacionadas con los Juegos Olímpicos de Invierno de 1984,
en el espectáculo de luces el día de la reapertura. Elvis Barukcic
en el espectáculo de luces el día de la reapertura. Elvis Barukcic
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